La autocompasión no es indulgencia, ni debilidad, ni excusa. Es la capacidad de tratarse a uno mismo con la misma humanidad, comprensión y cuidado con que trataríamos a un residente en formación o a un paciente que ha cometido un error. En neurocirugía, donde la exigencia roza lo inhumano, la autocompasión es una herramienta clínica, ética y emocional de primera necesidad.

  • Reconocer que se está sufriendo sin juzgarse por ello.
  • No reducir la propia identidad a un fallo o a un mal resultado.
  • No exigirse perfección para sentirse digno.
  • Permitirse descansar, pedir ayuda o poner límites sin culpa.
  • Recordar que ser humano no es un obstáculo para ser buen cirujano: es una condición.
  • No es evitar la responsabilidad.
  • No es conformismo profesional.
  • No es cerrarse a la crítica.
  • No es autoengaño.

Es, en cambio, la forma más ética de seguir adelante sin romperse.

  • Porque se ha formado al cirujano para dar siempre más, nunca para cuidar(se).
  • Porque se ha confundido valor con dureza.
  • Porque la cultura clínica premia la frialdad, no la ternura.
  • Porque nadie enseña a sostenerse después de un error, solo a evitarlo.
  • Aprender del error sin autodestrucción.
  • Pedir ayuda sin vergüenza.
  • Enseñar sin proyectar la propia culpa no elaborada.
  • Cuidar a otros desde un lugar más lleno, no desde el sacrificio crónico.
  • Reparar vínculos con uno mismo que el personaje profesional había olvidado.
  • Decirse internamente: “Hice lo mejor que pude con lo que sabía y tenía hoy.”
  • Preguntarse: “¿Cómo trataría a otro si hubiera pasado por esto?”
  • Permitirse llorar, dudar o parar… sin justificarse.
  • Recordar que el valor de uno como persona no depende del resultado clínico.

En un mundo quirúrgico que exige sin tregua, la autocompasión no es un privilegio: es un acto de justicia interna. Porque nadie puede operar bien si vive roto por dentro. Y porque el bisturí no sólo corta tejidos: también deja huellas en quien lo empuña.

La autocompasión no es quererse más. Es dejar de tratarse como un enemigo. Y eso, quizás, sea la forma más profunda de sanar.

  • autocompasion.txt
  • Última modificación: 2025/05/03 23:58
  • por 127.0.0.1