Juicio Ético en Neurocirugía: Pensar Más Allá del Bisturí
El juicio ético es la capacidad de valorar no solo lo que se puede hacer, sino lo que se debe hacer, en función del bien del paciente, del equipo y de la dignidad profesional. Es más que conocimiento. Más que experiencia. Es conciencia.
¿Cuándo se activa el juicio ético?
- Al indicar una cirugía con riesgos altos y beneficios dudosos.
- Al decidir operar a un paciente muy frágil o sin soporte social.
- Al plantear una reintervención más por presión externa que por necesidad clínica.
- Al presenciar una mala praxis o una humillación en quirófano.
- Al tener que decidir entre decir la verdad… o sostener la imagen.
Componentes del juicio ético
- Claridad clínica: conocer el caso y sus posibilidades reales.
- Empatía profunda: comprender al paciente como ser humano.
- Autoconciencia: saber desde dónde uno actúa (miedo, ego, prisa, compasión…).
- Coraje moral: atreverse a decidir lo correcto, aunque no sea lo cómodo.
- Coherencia: alinear palabra, acto y criterio.
Lo que no es juicio ético
- Repetir lo que siempre se ha hecho.
- Ceder al paciente sin informar claramente.
- Operar por inercia, prestigio o presión.
- Decidir en soledad cuando hay dilemas complejos.
==== ¿Cómo se cultiva